7 nuevos consejos para evitar robos en casa este verano

En 2017, se produjeron 105.099 robos con fuerza en los hogares españoles, según datos del Balance de Criminalidad publicado por el Ministerio del Interior. El verano es temporada alta para los amigos de lo ajeno y vuelven a repetirse los mismos trucos para evitar los robos en viviendas: ropa tendida, el vecino que nos retira las cartas y hasta dejar una luz encendida. Pero ¿son realmente útiles estas medidas? Es evidente que, como las alarmas, los ladrones también se modernizan. Por ello, la empresa de seguridad Bulldog ha actualizado los consejos básicos que, este verano, nos evitarán más de un susto.
1. Las ventanas cerradas. Parece obvio, pero antes de irnos de casa, debemos asegurarnos de haber cerrado bien las puertas y las ventanas. En verano es habitual dejar ventanas medio abiertas con tal que circule el aire y, cuando salimos de casa, es conveniente asegurarse que se han cerrado. Aun así, se recomienda dejar las persianas entreabiertas (aunque las cortinas mejor corridas para que no se pueda ver el interior).
2. Usa la llave. Es un clásico, pero lo más importante es cerrar la puerta principal con llave. A menudo nos confiamos y simplemente la dejamos cerrar sin empuñar la llave, confiando en que ningún ladrón se acerque a nuestro portal. Siempre es conveniente tomar precauciones. Y por supuesto, no dejar ninguna llave escondida en el buzón, una maceta o bajo el felpudo.
3. Dejar la ropa tendida ya no funciona. Ni tampoco pedir a un vecino que te vacíe el buzón de cartas durante tus vacaciones. Los tiempos han cambiado y las estrategias pasadas deben adaptarse: ni recibimos tanto correo, ni dejar una sábana tendida dos semanas seguidas conseguirá engañar a nadie. Dejar una luz abierta de vez en cuando también puede funcionar como medida disuasoria, para lo que hay posibilidad de instalar temporizadores. O incluso programar la televisión para que se encienda. La intención es simular que la casa está habitada, por lo que no está de más tener a un vecino, familiar o amigo que se pase a regar las plantas un par de días por semana.
4. Aplaza el postureo vacacional para la vuelta. Colgar una fotografía tuya en una playa paradisíaca es anunciar a bombo y platillo que estás a kilómetros de casa. Policía y Guardia Civil recomiendan no colgar ni publicar fotografías o vídeos mientras estamos de vacaciones: los ladrones también tienen Instagram.
5. Avisa a los vecinos. Igual que tienen redes sociales, los cacos también trabajan de manera organizada: por ejemplo, colocando cartas o publicidad comercial de manera estratégica en la puerta del inmueble (así comprueban si alguien entra). Del mismo modo, algunas bandas organizadas marcan las casas que vigilan para indicarse los tiempos de ausencia entre ellos. Pídele a los vecinos que, en caso de ver alguna cosa extraña, llamen a la Policía.
6. Esconde los objetos de valor. Igual que dejamos las cortinas corridas, es conveniente guardar a buen recaudo los objetos susceptibles a ser robados, ya sea en una caja fuerte o en el fondo de un armario. Realizar un inventario con fotografías y referencias de todo aquello que tenemos también es una buena idea.
7. Instálate una buena alarma. Y no hablamos de una alarma como elemento de efecto disuasorio o decorativo, no: debe estar activada y gestionada por una empresa profesional. Las últimas tendencias en el sector también demuestran una modernización de los sistemas de aviso: alarmas sin cuotas directas al móvil (con tecnología wifi), alarmas perimetrales para el exterior, o alarmas activas, con generador de niebla antirrobo para impedir la visibilidad del caco. De hecho, el factor determinante para evitar un robo es el tiempo: con una empresa como Bulldog detrás, la reacción es segura e inmediata.