Curso de pintura 6: pintar paredes con pistola (Bricocrack)

Este tutorial que vas a ver ahora es continuación 
de uno anterior donde explicábamos cómo se utiliza   la pistola para pintar. Si ya sabes utilizar 
la pistola para pintar, te puedes quedar y   continuar porque lo que vamos a ver ahora es 
cómo hacemos las aplicaciones con la pistola   pintando en paredes de yeso. Y, si no tienes 
todavía claro cómo se maneja la pistola, es   conveniente que veas antes el primer vídeo 
y así irás con mucha más seguridad en lo   que te vamos a explicar ahora.

¡Espero que te guste 
mucho! Y, antes de continuar, quería decirte una cosa. ¡Somos ya más de 600.000 suscriptores en el 
Canal!🎆🎉🎇 Así que os tenemos que dar las gracias a   todos los bricocracks que estáis suscritos en 
él 🤗🤗🤗 Para nosotros es realmente muy importante   -bueno, y creo que para vosotros también-, porque lo 
que conseguimos con esta presencia tan grande de   suscriptores es que los fabricantes se tomen 
muy en serio lo importante que es hacer vídeos   con una calidad de contenido técnico importante para vosotros. Así que os animo, si   no estáis suscritos todavía, a que lo hagáis (y deis a 
la campanita😉) porque realmente ésta es la manera de   que podamos tener un peso importante a la hora de 
poder transmitir contenidos de valor.

Ahora que ya sabemos cómo manejar bien la pistola, vamos a hacer aplicaciones decorativas   sobre pared que es una cosa muy interesante. En 
otros tutoriales, hemos hablado de los acabados   que hacemos en la pared o hemos hablado de la 
aplicación de pinturas un poco complicadas. Vamos   a ver cómo lo resolvemos esto con pistola. 
Concretamente, si te acuerdas, hace no mucho hicimos   un tutorial que hablaba de la aplicación de las 
pastas para juntas y hablábamos de lo importante   que es hacer unas terminaciones impecables. Cuando 
hacemos terminaciones impecables es porque vamos   a hacer aplicaciones de pintura muy exigentes y 
una de ellas, por supuesto, es la de utilizar la   pistola para hacer en este caso una aplicación de 
esmalte. Nosotros podemos poner esmalte laca en las   paredes -igual que en la madera- y nos va a quedar 
un acabado, como vas a ver, muy aterciopelado.

En la aplicación de esta primera mano, vamos a intentar 
cubrir pero sin abusar de cargar con la pintura. Esta primera capa actúa también como imprimación. 
Lo que hacemos es que, al preparar la pintura,   echamos un poco más de agua de 
lo normal. Vamos a hacerlo sin abusar, sin cargar   demasiado. Cuando demos la segunda mano, ya  
nos ocuparemos de ir igualando el acabado.   Vamos a preparar ahora esta pintura que es 
una pintura satinada. Nosotros la utilizamos   para hacer una demostración de la diferencia 
entre pintura satinada y pintura mate y muchos   profesionales nos dijisteis en los comentarios 
que lo más correcto para aplicar una pintura   satinada es hacerlo con pistola.

Claro, tiene 
lógica porque a nosotros nos costó mucho igualar con   el rodillo. Había que ir con mucho cuidado 
porque, en cuanto cargas un poco de más o un   poco de menos, al tener tanto 
brillo la superficie, se nota enseguida. Entonces,   efectivamente, la pistola es una solución que te 
permite equilibrar mucho mejor esta aplicación.   Cuando utilizamos la pintura, sobre todo en el caso de ésta 
que ha estado abierta mucho tiempo, es   muy importante que la filtremos bien. Tardamos
un poco en filtrarla porque al echarla en el filtro   de papel, como está muy espesa, tarda 
un poco, tiene impurezas, pero no pasa   nada. Tenemos paciencia, la filtramos y luego le 
añadimos una cantidad de agua generosa porque,    como tenemos que dar una primera mano de imprimación,  
tenemos que hacer que no sea tan espesa. Como te   decía antes, hay una proporción lógica entre el 
tiempo que tarda en caer a través del vaso y la   cantidad de agua que necesita una pintura. Porque, si la pintura 
es demasiado densa, sobre todo para una primera mano, nos va a costar más trabajo aplicarla.

De esta 
forma, le echamos un poco más de agua, que nos   quede diluida más o menos como teníamos la otra y 
la vamos a aplicando. Ésta es una pintura muy cubriente, así es que vamos a ir con cuidado con ella para 
no pasarnos. Voy a cerrar un poco el aire y también un poco el paso de pintura para ver si lo  
ajustamos para que no nos haga salpicaduras.   Yo creo que así está bien. No te preocupes por las salpicaduras porque esta   pintura se va a ir secando y en
la segunda mano se corregirá. Yo tengo preparada ya otra placa de yeso donde 
he hecho la misma aplicación, exactamente igual, una   parte gris y una parte roja. La voy a traer ya que 
está seca y vamos a aprovechar para ir aplicando   encima también la segunda mano y ver el resultado 
definitivo.

Como ves, a la hora de poner la pintura,    ha quedado muy bien repartida y todas las partes 
de brillo corresponden a zonas que están pendientes   de secado. Vamos a traer entonces la segunda placa. ¿Qué 
ventaja tiene esta aplicación primera que hemos hecho con el esmalte? Pues, imagínate, tenemos 
aquí una pared que está protegida con esmalte   de poliuretano, es decir, que tiene la máxima dureza 
posible, la que aplicamos en los muebles y demás   para rozarlos, ahora la tenemos en la pared. Es 
decir, tenemos paredes lavables y tenemos paredes   que tienen muchísima resistencia al rayado, a los 
golpes y demás. En el caso de esta pintura, ves que   la aplicación con pistola nos queda totalmente 
homogénea.

De hecho, nos queda ya un color y una   textura que nos invitarían casi a dejarla así. Pero un 
detalle muy interesante es que, si nos fijamos, esta pequeña marca que se ve 
un poco a través de la pintura corresponde a los   símbolos que tienen las placas para saber dónde está 
el centro y poder hacer la colocación. Fíjate, si se   ve, eso quiere decir que hemos dado una capa hiperfina.  
Y, realmente, con esta capa hiperfina sin embargo ya   nos da una sensación tremendamente homogénea. Pero,  
por supuesto, mientras veamos por debajo   cosas, eso quiere decir que el grosor que tiene de capa 
no protege suficientemente la pared. Con lo cual,   aunque parezca que está bien, es imprescindible 
la segunda mano.

Vamos a aplicársela a la pared de pintura plástica 
satinada y se la daremos también luego al esmalte.   Voy a hacer ahora la aplicación en vertical, ya 
que pinté antes las franjas en horizontal. Así, si   me queda en alguna zona un poco visible cualquier 
marca, de esta manera la hacemos más homogénea. Voy a insistirte con este concepto porque 
sé que cuesta entenderlo. Voy a aplicar, como   te dije antes, en vertical porque, aunque aquí no 
se vea casi, sí que es cierto que puede haber   franjas horizontales al pintar, por eso lo voy a hacer
en vertical.

Cuando yo pongo los pequeños cuernos de mi pistola en esta posición, es cuando me da 
el abanico en este sentido. Esto quiere decir que yo   estoy haciendo un pasillo ancho y voy bajando 
de esta manera la aplicación de la pintura. De esta manera, una pasada en horizontal y otra en 
vertical, es más homogéneo el resultado final.   Recuerda que no cabeceo con la pistola,  
voy siempre recto, siguiendo el recorrido. Algo lógico es que, si hago una aplicación en 
capas finas con pistola, tengo que elegir siempre   un tipo de pintura que tenga una resistencia y, 
sobre todo, una lavabilidad que pueda resistir   con estas capas tan finas. Porque, obviamente,
le estoy quitando un montón de carga de   pintura a la pared, con lo cual esto solo lo 
puedes hacer utilizando pinturas como ésta   que utilizamos nosotros, que sean muy resistentes 
y muy lavables. ¡Vamos con la aplicación del esmalte! Respecto de la limpieza de la pistola – que es otra 
cosa importante del trabajo-, aunque ya hablaremos   más despacio otro día de cómo hacemos la 
limpieza interior, desmontar la aguja, tipos   de pistolas, por qué pistolas de acero inoxidable… 
-todas estas cosas las comentaremos más adelante-.

Pero, como algo inmediato, para hacer 
la limpieza, agua caliente directamente en   este envase de plástico -se va perfectamente 
toda la pintura con agua caliente, así, en frío-,   siempre que utilicemos pintura acrílica que 
es lo razonable para trabajar con este tipo   de aplicaciones por supuesto. Y, directamente  
en la pistola por la entrada que tiene de   la pintura, con agua tibia. No utilizamos agua 
caliente, solo agua tibia. Apretamos el gatillo, dejamos   correr un poco y ¡ya está! Con eso se queda 
limpia para la siguiente aplicación.    Bueno, ves que son soluciones importantes desde el punto 
de vista de que sacamos partido a la pistola   para hacer cosas que realmente incorporen -no 
sencillamente utilizar la pistola por utilizarla-, porque en   principio, aunque es una herramienta que pinta 
muy deprisa, es difícil de uso en cuanto a la   preparación de los soportes. Por eso te decía antes
la importancia de los acabados Q3, Q4, de tener   soportes impecables porque, si no, con esto 
todo lo deprisa que avanzas lo pierdes luego   corrigiendo los defectos que se dejan ver.

Pero 
sí que es verdad que en este tipo de soluciones   es fantástica para darnos estos acabados que, 
como ves, son realmente muy bonitos y,   sobre todo, son resistentes porque los podemos hacer
con pinturas que nos aportan la dureza de la que   se utiliza para otro tipo de soluciones. Bueno,
espero que te haya interesado lo que te hemos contado. Como siempre, gracias por tu "like", 
suscríbete al Canal si no lo estás todavía -dando   por favor a la campanita- ya te dijimos antes que 
necesitamos mucho contar con vosotros y comparte   este vídeo con todos tus amigos a los que les 
guste el bricolaje y el mundo de la decoración.