¿Has probado ya el ChatGPT? Es muy probable que en las últimas semanas
te hayan hecho esta pregunta más de una vez. Y, es que, este chatbot que responde nuestras
preguntas usando inteligencia artificial se ha convertido en la aplicación de internet
con el crecimiento más rápido de la historia: 100 millones de usuarios activos en apenas
dos meses desde su lanzamiento a finales de 2022. Su masiva popularidad ha despertado el debate
sobre el impacto que ya está teniendo la inteligencia artificial y, sobre todo, cuál
puede llegar a tener en el futuro. Porque los avances en este ámbito van tan
rápido que ya hay inteligencias artificiales capaces de producir textos e imágenes indistinguibles
del trabajo humano.
Y este fenómeno también supone una revolución
para los recursos humanos. Según un informe del banco de inversión
Goldman Sachs de finales de marzo, la IA podría reemplazar a un cuarto de todos los empleos
realizados hoy por humanos, aunque también creará más productividad y nuevos trabajos. Pero mientras las máquinas aprenden a toda
velocidad, los expertos identifican 3 etapas del desarrollo de la inteligencia artificial
y dicen que estamos apenas en la primera. ¿Cuáles son esas fases? De eso hablamos en este video. La primera etapa es la que estamos viviendo
actualmente y se conoce como la Inteligencia Artificial Estrecha, o ANI, por sus siglas
en inglés. Se llama así porque se enfoca en una sola
tarea, realizando un trabajo repetitivo dentro de un rango predefinido por sus creadores
y generalmente se entrena utilizando un conjunto de datos, por ejemplo de Internet. Estos sistemas pueden igualar e incluso superar
la inteligencia humana… Aunque solo en esa área específica, porque
no pueden realizar otras tareas.
Es por eso que también se la conoce como
la Inteligencia Artificial “débil”. Es lo que ocurre, por ejemplo, con los programas
de ajedrez que usan la IA. Son capaces de derrotar incluso al campeón
mundial de esa disciplina, pero no pueden hacer nada más. Los sistemas de Inteligencia Artificial Estrecha
están presentes en nuestra vida mucho más de lo que puedas imaginar.
Por ejemplo, los smartphones están llenos
de aplicaciones que usan esta tecnología. Desde los mapas que llevan GPS para ubicarte
o los programas de música y videos que conocen tus gustos y te hacen recomendaciones. También los asistentes virtuales como Siri
y Alexa. O hasta el propio buscador de Google con el
que quizás, has encontrado este video. Los sistemas ANI también aparecen en la manufactura
de muchos productos, en el mundo financiero e incluso en algunos hospitales, para realizar
diagnósticos. Incluso sistemas más sofisticados como los
vehículos autónomos o el popular ChatGPT, del que hemos hablado antes, son formas de
ANI, ya que no pueden operar fuera del rango predefinido por sus programadores y no pueden
tomar decisiones por su cuenta.
Pero algunos expertos creen que los sistemas
como ChatGPT, que están programados para aprender automáticamente (machine learning),
podrían pasar a la siguiente etapa… Esta segunda categoría se conoce como Inteligencia
Artificial General, o AGI, por sus siglas en inglés. Se alcanza cuando una máquina logra adquirir
las capacidades cognitivas de un ser humano. Es decir, cuando es capaz de llevar a cabo
cualquier tarea intelectual que realiza una persona. Por eso, si la primera etapa se conocía como
la “IA débil”, esta segunda es la “IA fuerte”.
Y algunos expertos creen que estamos ya al
borde de llegar a esta etapa. Por eso, en marzo de 2023, más de 1.000 expertos
en tecnología pidieron en una carta a las empresas de Inteligencia Artificial que dejaran
de entrenar durante al menos seis meses a aquellos programas más poderosos que la versión
más reciente de ChatGPT. Entre estos expertos estaban el cofundador
de Apple, Steve Wozniak o el dueño de Tesla, Space X o Twitter, Elon Musk. Para ellos, los sistemas de IA que compiten
con la inteligencia humana podrían plantear profundos riesgos para la sociedad y la humanidad
y piden que los gobiernos pongan regulaciones. Una idea que defendió el propio director
general de OpenAI, la empresa creadora del ChatGPT, ante el congreso de Estados Unidos: Pero el gran temor no es únicamente que la
Inteligencia Artificial logre igualar la humana, sino que vaya más allá… Los científicos informáticos creen que una
vez alcancemos la segunda fase, tardaremos muy poco en llegar a la tercera: la Súper
Inteligencia Artificial, o ASI, por sus siglas en inglés.
Y como te estarás imaginando ya, en esta
fase la Inteligencia Artificial habrá superado a la humana. Según Nick Bostrom, filósofo de la Universidad
de Oxford y experto en IA, la súper inteligencia consiste en “un intelecto que es mucho más
inteligente que los mejores cerebros humanos en prácticamente todos los campos, incluida
la creatividad científica, la sabiduría general y las habilidades sociales". ¿Y por qué creen los expertos que pasaríamos
muy rápido de la segunda a la tercera categoría? Así lo explica el experto en inteligencia
artificial Carlos Ignacio Gutiérrez: “Es algo que tenemos que tener mucho cuidado
y hay que ser extremadamente proactivos en cuanto a su gobernabilidad. ¿Por qué? La limitante entre los humanos es qué tan
escalable es nuestra inteligencia. Para ser un ingeniero necesito estudiar muchísimo.
Para ser un enfermero, para ser una abogada,
se requiere muchísimo tiempo. El tema con la Inteligencia Artificial Generalizada
es que es escalable de inmediato”. Algo que comparte Geoffrey Hinton, el llamado
“padrino de la inteligencia artificial”. En una entrevista con la BBC, aseguró que
aunque las maquinas aún no son más inteligentes que nosotros, pronto podrían serlo. Por eso, el debate que se abre ahora es, ¿la
llegada de la súper inteligencia sería beneficiosa o perjudicial para la humanidad? Hay quienes creen que podría ayudarnos a
superar nuestras barreras biológicas y resolver los grandes desafíos de la humanidad. Como el investigador de IA en Google Ray Kurzweil,
que llegó a predecir en 2015 que para 2030 los humanos lograremos alcanzar la inmortalidad
gracias a nanorobots que actuarán dentro de nuestro cuerpo.
Pero otros consideran que es una amenaza para
nuestra existencia, como el difunto físico británico Stephen Hawking, quien ya advirtió
sobre el peligro para la raza humana en 2014. Muchos de los expertos reconocen que la IA
tiene un enorme potencial, pero consideran que el ritmo de desarrollo actual, sin regulaciones
y límites claros, es "preocupante". “Imagínate un futuro en que un ente tenga
tanta información sobre cada persona en el planeta y sus hábitos que nos podría controlar
de una manera que no nos daríamos cuenta. El peor escenario no es que haya guerras de
humanos contra robots. Lo peor es que no nos demos cuenta de que
estamos siendo manipulados porque estamos compartiendo el planeta con un ente que es
mucho más inteligente que nosotros. Imaginate un vecino que sea mucho más inteligente,
mucho más productivo y sabe hacer cosas que nunca podremos hacer nosotros”.
Por eso, el desafío que se plantean los expertos
y que les dejamos a ustedes es: ¿qué podemos hacer ahora para evitar que en el futuro las
máquinas mucho más inteligentes que nosotros tomen el control?.
Productividad con Inteligencia Artificial con José Vicente Martinez